Artículo 1
Trewlandia se constituye como una República digital, soberana e independiente, cuyo pilar es la comunidad. Se funda en los valores de la libertad de expresión, el respeto mutuo, la creatividad y la búsqueda del conocimiento.
Un sitio oficial del Gobierno de la República de Trewlandia
La ley fundamental que rige los derechos, deberes y la estructura de Trewlandia.
Trewlandia se constituye como una República digital, soberana e independiente, cuyo pilar es la comunidad. Se funda en los valores de la libertad de expresión, el respeto mutuo, la creatividad y la búsqueda del conocimiento.
La soberanía reside intransferiblemente en los ciudadanos, quienes la ejercen a través del voto y otros mecanismos de participación directa y representativa establecidos en esta Constitución.
Se garantiza el derecho a una identidad digital, al honor y a la propia imagen. Todo ciudadano tiene derecho a la privacidad de sus comunicaciones y a la portabilidad de sus datos.
La libertad de creación artística, literaria, científica y técnica es un derecho fundamental. Queda prohibida toda forma de censura previa.
Es deber de todo ciudadano participar activamente en los procesos de votación, respetar las leyes emanadas de esta Constitución y contribuir al debate cívico de forma constructiva.
El Gobierno de Trewlandia se estructura en tres poderes independientes: el Ejecutivo, a cargo de la Administración; el Legislativo, representado por las Votaciones y Decretos; y el Judicial, encarnado en el Tribunal Ciudadano.
Los cargos de representación popular serán elegidos mediante sufragio universal, directo y secreto, a través de elecciones primarias y generales.
El Estado promoverá activamente la cultura, protegiendo y difundiendo las obras creativas de sus ciudadanos a través de sus canales oficiales.
El Departamento de Estado gestionará las relaciones diplomáticas con otras comunidades digitales, pudiendo establecer embajadas y nombrar embajadores para fomentar la colaboración y el entendimiento mutuo.